El próximo 18 de febrero el Sol ingresara al signo de Piscis, en este periodo se dan los necesarios cierres de ciclos, la necesaria introspección de Piscis, el fin del año cósmico, que reinicia en Aries con determinación y firmeza.
Para el común de la gente, cuando vivimos en ¨avidya¨ termino en Sanscrito que significa, no conocimiento o Ignorancia, no percibimos los ciclos naturales de la vida y del universo, debido a la excesiva distracción de los sentidos y el mundo físico.
Esto no significa que no afecte nuestra existencia, simplemente no somos conscientes de ello, e incluso la mente y el ego, en una profunda lucha por reafirmarse, lo ignora y lo niega. “El desconocimiento de la Ley, no nos exime de sus consecuencias”.
El ciclo de Piscis, despierta la condición mas profunda de cada Ser, de su psiquis, que se expresara de forma particular, en cada persona, dependiendo del proceso evolutivo de cada individuo.
En este particular, este cierre de ciclo anual cósmico de Piscis, se presenta, con lo que conocemos en Astrología como “Stelium”, acumulación de varias fuerzas planetarias en el mismo Signo.
En este caso intervendrán, por supuesto el Sol, además de Mercurio, Venus (planetas interiores, por lo tanto, de transito rápido) y Neptuno, ya en Piscis desde 4 de febrero del 2012 (permanecerá hasta el 30 de marzo del 2025), cuatro planetas muy importantes para el desenvolvimiento de la naturaleza humana: el Sol - la esencia del Ser y la vida; Mercurio - la mente; Venus - relaciones y afectos y Neptuno la profundidad del Ser y la psique.
Como siempre expreso, cada individuo vivirá esta experiencia en función de su proceso, que puede ser determinado por el estudio exhaustivo y la superposición de estas fuerzas, con su Carta Natal, pero lo que es común a todos, y especialmente para las personas de Piscis, nacidas en los primero 15 días de este Signo, tendrán la oportunidad de una revisión, de dirigir su atención hacia su Ser, hacia su desenvolvimiento consciente, que en definitiva es lo que cada individuo vienen a realizar en esta existencia. Bendiciones!
Fenando Roverano
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